Año que comienza y año que acaba

Un nuevo año comienza, y otro se acaba. Típica frase de estos días, acompañada de reflexiones, propósitos nuevos, promesas... Y la verdad, que en las últimas horas, he vivido diferentes situaciones que me han hecho no reflexionar, pero si pensar acerca de mí, mi vida.

Aspiro a que este año sea mejor, no peor como es lógico. Y al igual que el resto, deseo que lo mejor de este año, sea lo peor del que viene. Pero me llega la pregunta de por qué tengo que elegir. Porque me tengo que quedar con unas cosas y otras echarlas al olvido.

Es cierto que hay cosas que nos ocurren y que nos gustaría no volverlas a pasar, por lo mal que nos han hecho sentir en ese momento. Y tengo la teoría o la certeza, de que sin esas cosas no tan buenas, las buenas de después no hubieran sido igual. El trabajo regalado, no se recibe igual que en el que te esfuerzas por lograrlo. Por eso creo que para tener algo bueno, algo un poco peor te tiene que ocurrir o tienes que vivir.

Si pienso acerca de este año que hace unas horas acabo, hay muchas cosas que desearia no volver a pasar en el futuro, pero que a día de hoy, no cambiaria si pudiera volver a atrás. Tal vez ciertas palabras, o el modo de actuar, pero creo que ni eso. Creo que ocurrió como tenía que ocurrir. Ya que también al mirar meses atrás, una sonrisa recubre mi cara, y no la puedo borrar.

No ha sido un año para enmarcar, pero tampoco para borrar. He vivido experiencias que antes no había vivido, he aprendido mucho, he caido y he sabido levantarme. Me he conocido en situaciones extrañas antes para mí, y he descubierto cosas inexplicables. Y todo eso, constituye mi vida, mi interior, mi ser. Lo malo, lo regular, lo bueno, lo muy bueno y lo peor. Todo ello reunido, ha construido la persona que ahora soy. La persona que empieza un año nuevo con optimismo, con fuerzas y con la seguridad, de que este año quiere que sea especial.

Que de la forma en la que acaba el anterior, me hace creer que es un anticipo de lo bueno que me espera. Me gustaria decir que no vendran meses malos, y que no vivire situaciones no tan buenas. Pero la vida es asi, un camino con piedras, altibajos, cuestas, pero también con senderos lisos, buenos, agradables... Por eso no me preocupo, me dejo llevar, y me tocará improvisar a la que voy caminando... Viviendo, solo eso. Viviendo pero con mejor actitud que otros años atrás.

Al menos este año, lo empiezo sintiendome viva de verdad....